El PJ Se Resignifica. Por Un Norte Con Dignidad: Cueste Lo Que Cueste.

El PJ Se Resignifica. Por Un Norte Con Dignidad: Cueste Lo Que Cueste.Reminiscencias y grandezas del norte provincial se construyeron sobre bases de explotación salvaje y naturalización de exterminios. La Forestal Argentina – fugando ganancias extraordinarias al exterior – desbastó recursos naturales dejando en la corona de sus chimeneas – fabricas tenineras – la copia perfilada de la Corona anglosajona como cello de sojuzgamiento y dominio cultural en cada uno de nuestros pueblos. 42 años de democracia no cambiaron un ápice el espíritu y abstracción dependendista en la que cada una de nuestras regiones y pueblos son objeto, objetivo y, sentencia.

En el advenimiento de la democracia, año 83´, cada pueblo del Centro Norte provincial mudó su dependencia al centralismo santafesino, mezquindad y migajas que La Invencible y sus gobiernos unitarios, dejan caer en recursos al solo efecto de no permitir su desaparición o pertenencia a provincias vecinas. La masa coparticipable se reparte, en el mejor de los casos, en un 8 % a comuna y municipios. 10 departamento sobre 19 no tienen representatividad legislativa y las senadurías – departamental -, se caracterizan por fortalecer Reales Feudos Instaurados. La lógica imperante justifica fuertes inversiones – fondos dinerarios y obra pública – en grandes centros demográficos, industriales y culturales.

Intendentes del Centro/Norte, lejos de proyectar con integridad y autonomía, solo reducen su paso por las entidades publicas concretando gestiones y recibiendo lo que el Poder Central está dispuesto a facilitar y otorgar: el resultado primigenio exhibe un altísimo costo en amplios sectores sociales con fuertes migraciones que desangra a los pueblos y justifican aventadas tasas de pobreza y marginalidad. El desarraigo y sentido de pertenencia destruyen oportunidades y poblaciones. Una estructura de provincia que engrandeció un sur desarrollado que, la nueva constitución provincial, tampoco alberga instancias superadoras, cambios esperados y ancestrales reclamados.

Apostar a embanderar crecimiento económico y desarrollo de regiones conforme a cambiar, es esperar y haber esperado demasiado y, estructurar la trampa naturalizada y estructurada que nos ubica en un presente cargado de reclamos desde voces que jamás fueron escuchadas ni se escucharán. Apostar a cambios estructurales levantando la voz en fuerte disidencia con el poder central es una entidad que asusta y congrega a pocos quijotes altruista ¿Qué otra cosa le queda al norte provincial?

Fuertes o débiles, a quien le importa, el norte decidió encarnar un proyecto social, enclaves económicos, ampliación de obra pública y Autonomía De Región, sin preguntar ¿cuánta de las migajas del sur financiará el proceso? ¿A cuántos y quiénes, de los subordinados al sur, formarán parte de mesas estratégicas de campaña y cuántos cargos – hijos de sujeción – estarán en el próximo gobierno provincial? Nada de esto sirvió ni servirá.

No cambió la triste realidad. No cambiarán las estratagemas que nos empobrecieron. No habrá justicia distributiva ni oportunidades, a menos que se la reclame desde y con Autonomía e Integridad de región.

Las actuales condiciones solo nos garantizaron sumisión y pobreza. Solo queda la única alternativa posible, válida y recurrente.

Cueste Lo Que Cueste…