Crimen en la autopista Illia

La cámara del peaje muestra cómo un hombre se acerca al auto del oficial y pelean, pero no se pueden ver detalles. El cabo dice que el arma se activó “de forma accidental, durante el forcejeo”.

La defensa del prefecto Daniel De Jesús Acosta, de 28 años, quien mató a un automovilista en la autopista Illia durante una discusión de tránsito, aseguró que el disparo fatal se produjo durante un forcejo en el que el efectivo actuó en “legítima defensa” tras ser atacado a golpes de puño por la víctima y otro hombre.

Y este lunes por la noche se conocieron las imágenes de la cabina de peaje de la autopista Illia. En la grabación se ve cómo un hombre se acerca al auto del prefecto y pelean, pero no se pueden precisar detalles como si el disparo fue accidental o intencional, la prueba clave para determinar si fue o no legítima defensa, como aduce el cabo, que está detenido.

El prefecto declaró este lunes por la tarde ante la Justicia para dar su versión de los hechos, y su relato que se esperaba se viera confirmado por imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la Illia, pero no aportan mucho.

Acosta fue detenido acusado de “Homicidio agravado” por la muerte de Damián Cutrera, de 41 años, ocurrida en la madrugada del domingo a la altura de las cabinas de peaje de la autopista.

Damián Cutrera, la víctima, junto a su esposa.

El cabo primero de la Prefectura manejaba un Volkswagen Gol que tuvo un incidente de tránsito cuando, según su defensa, el Renault Clío de Cutrera se le cruzó y lo encerró.

A llegar a la cabina de peaje, siempre según la versión del prefecto, el Clío lo chocó de atrás, y acto seguido descendieron Cutrera y otro hombre y comenzaron a insultarlo.

“Mi cliente tenía la ventanilla baja porque iba a pagar el peaje y aprovechando esa circunstancia le pegan golpes de puño y lo toman del cuello”, dijo este lunes Ramiro Zoloaga, abogado de Acosta, y aseguró que a su cliente “a simple viste se le notan los hematomas”.

El letrado dijo que en determinado momento, y al no cesar las agresiones, su cliente tomó el arma reglamentaria para amedrentar al otro automovilista, quien al observar la acción intentó quitarle la pistola. Todo este accionar no puede corroborarse con el video de la cabina de peaje, dónde sólo se ve cómo la víctima del prefecto se baja de su auto y se dirige para discutir con el cabo, que permanece en su vehículo.

“Es ahí cuando se genera un forcejeo y sale un disparo”, aseguró el abogado, para quien “es fundamental la pericia balística y lo que se pueda observar en los videos” de las cámaras de seguridad del peaje, que ya obran en poder del juzgado interviniente.

La persona fallecida iba junto a su esposa y dos amigos, mientras que el prefecto asesino iba con su pareja y sus dos hijos, uno de ellos un bebé.