De versar sobre una particular materia: la seguridad y el control de la paz en las calles, en 80 días de gobierno pasamos a aplaudir la ilegalidad de recibir fuerzas militares en Rosario. 4 muertos inocentes de la mano de células ilegales – venta de droga ilegales – por clanes familiares, desorganizados con una fuerte ascendencia violenta, descripción de funcionarios de Pullaro, contrastan con la declaración de guerra pronunciada por la ministra de seguridad nacional cuyo perfil esta pletórico de muertes de inocentes de la mano de obscenos abusos del monopolio de la fuerza estatal y paraestatal. Un debate disfrazado de incautas falsedades que desvían preguntarnos sobre la única verdad que interesa: ¿Quién controla la venta y distribución de la droga en Rosario? ¿Quiénes lavan millones de dólares insertándolo al circuito comercial formal? ¿Los llamados Narcos?
Con las ingenuas disculpas de quienes militaron para Milei y Pullaro ante su sesgo arrepentido, los cierto es que la obra pública, proyecciones y programas financiados por ambos estamentos del estado cayeron sin explicaciones dejando tierra arrasada al contarse desocupados y marginalidad ante una realidad que jamás se vio. El sistema de cooperativas que impulsó la ciudad de Reconquista avanzando con 70 obras en simultaneo al ocupar más de 2.000 operario ha desaparecido ingresando a la desesperación de tener que asistir a esa gente en comedores comunitarios. También desfinanciados por el mismo Estado.
Los adalides del equilibrio y denunciante del látigo y chequera que repudiaron discriminación institucional, son los que hoy dejan sin obra pública a localidades que, casualmente, pintan colores de partidos opositores, instruyen decididos un ahogo financiero programado fortaleciendo un polvorín social, con el que pretenden obtener resultados electorales favorable en las próximas contiendas. La única gran intendencia bajo el control de una gestión peronista es la ciudad de Reconquista. Un elefante blanco que a los radicales en el poder preocupa y les quita el sueño.
En un contexto nacional privatizador cuyas políticas está destinado a achicar el estado a su mínima expresión, apunta a la línea aérea de bandera nacional destinada a ser vendida como chatarra. Bajaron 15 contratos de vuelos al interior del país, dentro de la que se encuentra la ciudad de Reconquista. Concejales opositores denunciaron sobre una deuda inexistente explicando una decisión tomada por razones económicas y política a 900 kilómetros del norte. Cuando los discursos no visten los trajes, insoslayablemente, se buscará un tercero expiatorio de culpable.
Capituladas las críticas en crónica de opinión pública, en tiempo de perottismo, la valentía partidaria encarnadas por el Senador Marcon y el Diputado provincial, Dionisio Scarpin, se escudaron en objetivo de víctimas de una persecución y exclusión, los mismos que hoy callan y otorgan. 12 años de Frente Cívico y Progresista transfiriendo recursos a sus acólitos a cambio de ahogar comunas no alineadas u opositoras. Hoy devenidos en opresores y victimarios.
El peronismo del norte santafesino – abajo firmantes – repudiamos el cinismo y accionar con que se moldean operaciones y discursos que solo se elevan en la discriminación acreditada en especulaciones cuyo daño irreparable lastima en los más profundo de la dignidad de todas y todos: hambre, pobreza, necesidad y miseria muestran un faro indigno que identifican a unos únicos responsables.
Maximiliano Pullaro, como otros tantos, llegan al poder para borrar mostrando sus verdaderas y únicas intenciones desvaneciendo lo sellado en campaña. Otra formidable estafa electoral cuyas variables consiste en lo único previsible y aplicable: la odiosa discriminación a comunas y municipios que no responden al palo partidario de quien controla la chequera y los fondos de todos.
Gustavo Lebus – Darío Araujo
Julio Niemiz – Diego Franco
Hugo Romero – Ramon Romano
Dito González – Milena Vera
Adriana García – Néstor Bonora
Mario Zabala – Ángel Dorado
Agrupación Política Avellaneda PJ