El día viernes el presidente de comuna de Villa Ana comenzó a pagar la diferencia de lo resuelto por su gestión de manera arbitraria del “Pago En Negro” de un alto porcentajes de los haberes a los empleados comunales bajo la tipificación de “Subsidio Social”. Lo que históricamente se encuadra en términos administrativos como Suma no Remunerativa fue cambiada por “Asistencia Social”. Fueron depositados $ 9.600 en los cajeros y el resto se pago bajo la nominación ya denunciada. A Ningún empleado se le pago aumentos establecidos en paritarias, ni cláusula gatillo. Se prevé un paro la próxima semana ante un ánimo colectivo intolerante.
Luego de negarse a presiones por parte del presidente de comuna de Villa Ana, Catalino Comán, de bajar salarios o despedir gente, el personal de planta respondió con un paro organizado el mes pasado que atento a no concretarse las amenazas “no tuvo efecto ni concreción”. El mes pasado todo el personal cobró en tiempo y forma, aunque nunca se pagaron los aumentos paritarios establecidos ni se aplicó la cláusula gatillo también establecida conforme acuerdos en vigencia en todo el territorio santafesino. Ante las presiones y el mal humor del personal, Comán desistió de sus amenazas y, finalmente y ante la intervención del gremio ASOEM, Comán cumplió.
Veranito que no duró mucho. El viernes últimos y de manera inconsulta el presidente de comuna decidió solo pagar sumas que ascienden a $ 9.600 obligando a que el resto de los haberes “se pague en negro” bajo la modalidad de Asistencia Social. Las explicaciones dada por Coman contrastan seriamente con la realidad: La provincia le duplicó la coparticipación y en menos de un año de gestión al frente del palacio comunal Comán afectó no menos de 12 personas de su entorno a cumplir tareas, incluso, donde ya hay personal nombrado y afectado desde años. Gran parte del personal comunal efectivo no tiene tareas específicas y cumple con responsabilidades ociosas, dado, que fue reemplazado por personal contratado por Comán. A esta lamentable realidad debemos recordar el obsceno crecimiento económico de su patrimonio personal que advierte compra de una camioneta 4×4 cuyo valor arriba a $ 500.000. Una lancha por la que pagó $ 280.000, compra de vacas y toros y el acondicionamiento de un pequeño campo al que convirtió en un feedlot utilizando personal de la comuna y maquinas pertenecientes al erario público – parque automotor – además de fondos que nunca pudo explicar.
La gota que colmó el vaso a todo el personal comunal rebasó su paciencia ante los reclamos de exigir el pago de aumentos paritarios establecidos que nunca fueron abonados incluyendo la clausula gatillo en vigencia. La respuesta comunal se pronuncio en amenazas de bajar sueldos y expulsar trabajadores a lo que se suma la decisión arbitraria de pagar “En Negro” una significativa suma de sus haberes cancelados el viernes último tipificada como “Ayuda Social”.
“Nosotros no necesitamos ayuda social de nadie. Trabajamos, tenemos derechos y queremos que cumplan con lo que establece la ley”, señalaron varios de sus trabajadores adelantando que esta actitud no “se tolerará mas” al presidente de comuna. Se cierne un paro de sus trabajadores en los primeros días de la semana entrante y mucha discusión ante un mal humor que ha puesto a las relaciones al borde de la indignación y los insultos.