Algunos predios rurales están inundados desde la segunda quincena de diciembre de 2018. La mayor preocupación es el excedente hídrico que drena desde Santiago del Estero y el Chaco.
Los productores agropecuarios del norte de Santa Fe sienten el efecto de las inundaciones ya que, a pesar de que hace meses no llueve, el agua sigue corriendo y paralizando la actividad primaria. Caminos cortados, aislamientos, reclamos no escuchados, son el denominador común de los productores.
En la zona de Cañada Ombú la situación es muy complicada según los productores de esa zona. El agua baja lentamente, pero recién se ven graves problemas en la producción primaria.
“Don Rodas, ¿cómo está el nivel en Los Amores? ¿Sigue desbordado?”, pregunta un productor chaqueño que tiene campos en el norte de Santa Fe a Andrés Rodas, que observa atentamente el comportamiento del nivel de las aguas y está atento y presto a cualquier consulta.
Los predios rurales del norte santafesino están inundados desde la segunda quincena de diciembre de 2018. Las lluvias fueron una amenaza constante, como sucedió en la zona de El Nochero, pero la mayor preocupación es el excedente hídrico que va drenando desde Santiago del Estero y el Chaco. El problema de financiamiento, con tasas de interés muy elevadas, dificulta todo intento de recuperación.