Una vecina de Villa Ana solicitó un subsidio a la provincia que fuera gestionado ante los canales convencionales. Al cabo de un tiempo y a instancia de la Cámara de Senadores bajo la primer remesa que fuera entregada por el Presidente de Comuna de Comuna de Villa Ana, Catalino Comán, cuyo valor asciende a $ 15.000 de los $ 100.000 presupuestados en su totalidad. A un año de espera y rendiciones la vecina reclama que le abonen los otros $ 85.000 que jamás aparecieron y nadie brindo una mínima explicación institucional.
El año pasado en el mes de febrero, según reza el documento, ante gestiones realizadas por los canales convencionales bajaron los primeros y únicos $ 15.000 conforme a una ayuda que ascendía a $ 100.000 destinado a la compra de materiales para la construcción de un tinglado sumado a un TORNO en el marco de una ayuda económica a un micro emprendimiento forestal ubicado en la localidad de Villa Ana. Los fondos fueron entregados en el mes de febrero de 2018 y según la documentación presentada es la primera remesa recibida por la titular del micro emprendimiento.
A pocos días se realizaron compras de chapas y horcones y se presentaron las boletas de la adquisición cumpliendo con las rendiciones que el proyecto requiere y exige. Según la vecina, las boletas se presentaron en el palacio comunal de Villa Ana atento a las sugerencias recibidas en el momento en que le fue entregada la primera remesa de dinero. Desde ese momento y hasta la fecha, jamás se supo que pasó con los $ 85.000 restantes no solo dejando el proyecto inconcluso sino, a la titular del proyecto sin su entidad de trabajo y figurando como deudora de rendiciones de un dinero que jamás le pagaron.
En los últimos días la vecina se acercó al banco en el que figura la cuenta creada a tal fin – Nuevo Banco de Santa Fe – /Nos reservamos número de cuenta y numero de Cheque/ sin obtener una aclaración satisfactoria respecto de su inquietud. Lo que se le sugirió es que no se presentaron las rendiciones correspondientes. La vecina en cuestión hizo sus compras en un conocido corralón de Villa Ocampo cuyas boletas fueron exhibidas y presentadas en el ente comunal de Villa Ana.
Hasta el presente se sigue preguntando, a un año de recibir la primera remesa, qué pasó con los restantes $ 85.000 de los que nadie parece saber algo.